La Inteligencia Artificial (IA) se ha convertido en una aliada clave en el mundo laboral, desde la automatización de tareas hasta la generación de informes detallados, la elección de la IA adecuada puede marcar la diferencia en la eficiencia y productividad de una empresa. Sin embargo, no todas las IA son iguales ni se les debe hablar de la misma manera. ¿Cómo hacerlo con Perplexity, ChatGPT, Grok 3, Deepseek y Gamma?
Isaac Castejón, CEO y Fundador de Newbrain Ventures, laboratorio de emprendimiento especializado en inteligencia artificial, enfatiza la importancia de entender la función de cada herramienta. “Más allá de incorporar IA en el día a día, es crucial identificar cuál es la más adecuada para cada actividad y comprender cómo interactuar con ella”, afirma Castejón.
IA según la necesidad: cuál elegir y cómo hablarle
1. Búsqueda de información rápida: Perplexity
Si el objetivo es encontrar datos rápidos y precisos, Perplexity es una de las mejores opciones. Funciona como un buscador avanzado que proporciona respuestas directas, con referencias para verificar su exactitud.
Cómo hablarle: Se recomienda formular preguntas concretas.
Ejemplo: “¿Cuándo se pagan los impuestos de rete ICA en Colombia?”
2. Investigación profunda y generación de reportes: Deep Research de ChatGPT
Para análisis extensos, tendencias de mercado o informes detallados, Deep Research de ChatGPT permite procesar grandes volúmenes de información de manera estructurada.
Cómo hablarle: Es fundamental especificar el enfoque y las fuentes deseadas.
Ejemplo: “Realiza un análisis detallado sobre las principales amenazas de mi industria en 2025.”
3. Noticias en tiempo real: Grok 3
Grok 3 es ideal para acceder a información de actualidad, ya que se alimenta de datos en tiempo real desde X (antes Twitter). Es especialmente útil para temas en constante cambio.
Cómo hablarle: Pedir un resumen con fuentes verificadas.
Ejemplo: “Proporciona un resumen de las últimas noticias sobre la crisis bancaria en Guatemala.”
4. Análisis de datos: Julius IA
Cuando se necesita interpretar bases de datos sin conocimientos avanzados de programación, Julius IA ofrece una solución intuitiva.
Cómo hablarle: Plantear preguntas específicas sobre correlaciones o tendencias.
Ejemplo: “¿Existe una relación entre el punto de datos X y el punto de datos Z?”
5. Resolución de problemas complejos: Deepseek
Para análisis estratégico y toma de decisiones, Deepseek actúa como un “colega” virtual que proporciona perspectivas analíticas sobre distintos problemas.
Cómo hablarle: Plantear escenarios detallados con variables claras.
Ejemplo: “Tenemos baja productividad en ventas. Nuestra estrategia comercial es X y el modelo de compensación es Z. ¿Qué podría estar afectando el rendimiento?”
6. Creación de presentaciones: Gamma
Gamma automatiza el diseño de presentaciones con estructuras visuales coherentes, ahorrando tiempo y esfuerzo en su elaboración.
Cómo hablarle: Definir la estructura y los elementos clave de la presentación.
Ejemplo: “Genera una presentación sobre los valores de la empresa con una introducción, tres tendencias clave y dos proyecciones futuras.”
El verdadero potencial de la inteligencia artificial no solo radica en seleccionar la herramienta adecuada, sino en saber interactuar con ella. “Las IA no son entidades omniscientes, dependen de la calidad del input que reciben para generar respuestas útiles”, señala Castejón.
Cada IA opera con algoritmos diseñados para tareas específicas, lo que implica que deben recibir indicaciones adaptadas a su funcionamiento. Pedirle a un chatbot conversacional que realice un análisis de datos es tan ineficaz como solicitarle a una IA especializada en gráficos que redacte un informe técnico.
Con aproximadamente 70,000 soluciones de inteligencia artificial disponibles en el mercado, la elección de la herramienta adecuada puede parecer un desafío. Sin embargo, comprender sus fortalezas y saber cómo comunicarse con ellas marca la diferencia. La IA no solo optimiza tareas, sino que también impulsa la innovación y la toma de decisiones basadas en datos. Integrarla de manera estratégica puede transformar la productividad y eficiencia de cualquier entorno de trabajo.
Imagen: Montaje ENTER.CO