Las imágenes creadas con inteligencia artificial se han convertido en una de las aplicaciones más populares de la AI que hoy vemos. Están siendo utilizadas por agencias de publicidad, por medios de comunicación y por usuarios que quieren descubrir cómo luciría una película de Pixar sobre Transmilenio. Pero uno de las cosas que poco se ha discutido sobre su creación es el impacto ambiental que tiene una imagen generada con AI.
Al igual que la mayoría de tecnologías que requieren de servidores, las imágenes IA generan huellas de carbono porque requieren de una cantidad considerable de energía. Así que la universidad Carnegie Mellon de los Estados Unidos, en colaboración con el startup de AI Hugging Face, descubrieron que producir cada una de estas imágenes utilizando inteligencia artificial es equivalente a cargar un celular al 16%.
El experimento fue realizado utilizando 88 diferentes modelos de inteligencia artificial y 30 diferentes sets de datos. No solo esto, sino que el objetivo era examinar todas las tareas que hoy pueden realizar estos modelos, midiendo su huella de carbono. La producción de una imagen generada con AI encabeza la lista por mucho. En el listado le siguen en orden:
– Resúmenes multitarea.
– Etiquetar o analizar imágenes.
– Producir resúmenes.
– Generación de texto.
– Sesiones de preguntas de tipo multitarea.
– Detección de objetos.
– Clasificación de texto multitarea.
– Clasificación de imágenes.
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El impacto ambiental puede no parecer mucho, en especial cuando se compara con otras tecnologías como es el Blockchain, que suelen tener un impacto ambiental mucho mayor. Sin embargo, el informe pone especial atención a cómo la generación de imágenes utilizando Inteligencia artificial se ha convertido en uno de los usos más populares de modelos como ChatGPT, que en su punto más alto de popularidad alcanzó los 100 millones de usuarios activos al mes. En el caso de las imágenes generadas por IA es un problema importante al revisar cualquier línea de tiempo en Instagram o foro de Internet y encontrar que cada vez más usuarios y empresas están normalizando su aplicación. No sería nada extraño que en algún momento el pedir a un modelo que genere estas imágenes se convierta en una tarea de todos los días para la mayoría.
En respuesta a este panorama los investigadores como conclusión realizaron una invitación a “practicar la transparencia con respecto a la naturaleza y los impactos de sus modelos, para permitir una mejor comprensión de sus impactos ambientales“.
Imágenes: Foto de Cash Macanaya en Unsplash
