La adolescencia es una etapa de cambios significativos, llena de dudas sobre el futuro, las relaciones personales, la identidad y las emociones. Los jóvenes enfrentan decisiones cruciales mientras pasan de la niñez a la edad adulta. En este proceso, la Inteligencia Artificial (IA) se ha convertido en una herramienta clave para brindar respuestas rápidas y accesibles a sus inquietudes, ayudándoles a manejar estos complejos desafíos.
En Colombia, Luzia, una de las aplicaciones de inteligencia artificial más populares entre los adolescentes, realizó un estudio sobre las inquietudes de los jóvenes de 16 a 20 años. Los resultados muestran que, aunque las preocupaciones de la Generación Z no son tan diferentes a las de generaciones pasadas, la forma en que buscan respuestas ha cambiado: ahora recurren mayormente a la tecnología.
Una de las principales preocupaciones entre los adolescentes es la presión por cumplir con las expectativas de sus padres en áreas como el comportamiento, el rendimiento académico, las decisiones profesionales y los valores. Estas expectativas, influenciadas por la cultura y las experiencias de los padres, pueden generar dependencia, limitando la autonomía de los jóvenes. Muchos buscan consejos sobre cómo ganarse la confianza de sus padres y manejar la presión académica.
El uso de redes sociales y el tiempo frente a las pantallas también es un tema recurrente. Los jóvenes se preocupan por los efectos negativos de estas plataformas en su bienestar emocional, concentración y descanso. Preguntas como “¿Soy adicto al celular?” reflejan la creciente conciencia sobre cómo la tecnología impacta sus vidas.
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El miedo al rechazo social y la necesidad de encajar en su entorno es otra preocupación importante. Los adolescentes buscan maneras de mejorar su imagen personal y sentirse aceptados, pero también se cuestionan sobre cómo lograrlo sin perder su autenticidad. Preguntas sobre el éxito profesional y las relaciones personales reflejan el temor a no cumplir con los estándares impuestos por la sociedad.
Otro tema relevante es la dificultad para expresar emociones. Con el creciente enfoque en la salud mental, los adolescentes buscan formas de comunicarse con sus padres y amigos sobre lo que sienten, ya sea por problemas emocionales o inquietudes personales. Esto incluye preguntas como “¿Cómo decirle a mis padres que me siento mal?”
La identidad de género y la orientación sexual también son preocupaciones frecuentes. Muchos jóvenes exploran su identidad en busca de respuestas, pero la falta de espacios seguros para hablar de estos temas sigue siendo un desafío. Preguntas sobre cómo abordar estos temas con los padres reflejan la necesidad de un apoyo emocional adecuado.
Finalmente, el miedo al futuro es una preocupación constante. Los adolescentes sienten la presión de tomar decisiones profesionales sin tener todas las respuestas. Preguntas sobre cómo comunicar sus deseos a los padres o cómo seguir una carrera creativa muestran su incertidumbre sobre el futuro laboral.
A pesar de que la tecnología, como la IA, ayuda a los jóvenes a resolver algunas de estas dudas, el apoyo emocional de padres, amigos y mentores sigue siendo fundamental para enfrentar los retos de la adolescencia. Etapa que sigue siendo crucial en el camino hacia la edad adulta, y muchas respuestas se encuentran en el proceso de crecimiento personal.
Imagen: cottonbro studio
