Esta nota de emprendimiento colombiano será diferente a las anteriores. En esta ocasión hablaremos de una emprendedora que hace aretes. Su procedimiento no involucra herramientas tecnológicas, lo único que necesita son sus manos y mucha creatividad. Así fue como nació Carolina Patiño Accesorios, un negocio que nació en los tiempos libres de una mujer que quiso tener su propia empresa.
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Carolina Patiño es una mujer colombiana cuyo título profesional es en negocios y relaciones internacionales. Al no encontrar una alternativa para su carrera, decidió tomar las medidas respectivas. Pero el lograr que su emprendimiento viera la luz no fue un golpe de suerte. Desde sus épocas como universitaria, Carolina siempre buscó la forma de hacer dinero. Importó ropa, bolsos y maquillajes para venderle a sus compañeras. A la par se dio cuenta de que tenía la facilidad de hacer manualidades sin haber tomado algún curso.
Nacimiento de Carolina Patiño Accesorios
Todo esto se inició en diciembre de 2018, en una noche en la que Carolina no podía dormir porque sentía la necesidad de hacer algo que la motivara. Según nos contó, ya estaba aburrida de ver contenidos en Netflix. Así que tuvo la idea de hacer velas o figuras en icopor, la cual pausó esa misma noche al no saber cómo elaborar los productos. Entonces se dio cuenta de que al siguiente día usaría un vestido verde, para el cual no tenía un par de aretes con el color apropiado.
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Se levantó temprano y visitó varias tiendas que le podían dar algunas ideas para crear sus propios aretes. Para ella, estos accesorios son muy importantes porque su diseño influye mucho en la personalidad de quienes los portan. Así que compró los insumos, los diseñó y los estrenó durante una reunión familiar decembrina. Para su sorpresa, varios de sus familiares quedaron asombrados con los diseños y se convirtieron en sus primeros clientes.
Su hermana, su cuñada y su tía fueron las primeras en pedirle un par de aretes. Entonces Carolina se dio cuenta de que esta podía ser una gran idea para conformar su propia empresa. “Mi familia fue el elemento fundamental para hacer todo esto realidad. Ellos me recomendaron crear el perfil en Instagram y seguir trabajando para concretar el proyecto. Entonces busqué por dos semanas el nombre de la empresa. Este debía representarme en mi nivel de exigencia en los detalles. Así que decidí llamarlo Carolina Patiño Accesorios”, relató.
De menos a más
El orden para Carolina es vital. Su primera tarea fue crear un cuadro de costos, inversiones, ganancias, reinversión, entre otros. Realizó su primera inversión en insumos para crear sus primeros diseños y promocionarlos por su recién creado perfil de Instagram. Ya van cinco meses y con respecto a la posibilidad de presentarse a una incubadora, esta emprendedora es consciente de que su idea de negocio necesita mayor estructuración.
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Pero no por eso Carolina se ha quedado sin apoyo. La Universidad de La Salle, institución de donde es egresada, le otorgó una beca para un curso de emprendimiento donde tuvo la oportunidad de trabajar con otros emprendedores de diferentes líneas de negocio para aprender más del mercado.
Diseños y creatividad de los aretes
El proceso de creatividad se inicia con el tamaño de los aretes y los colores. El diseño depende de Carolina o del cliente. En ocasiones, los interesados en los aretes ya tienen un diseño que quieren replicar junto con Carolina. Para los demás casos, Carolina lanza el diseño y los clientes los compran ya hechos. “Cuando un cliente me muestra el diseño que quiere, regularmente tardo entre 2 y 3 horas haciéndolos. Pero cuando todo el proceso depende de mí, desde la noche anterior estoy pensando qué quiero hacer y cómo lo lograré”, señaló.
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Finalmente, la emprendedora considera que uno de sus mayores temores es que su creatividad se apague. “Cuando quiero hacer un nuevo diseño siempre intento plasmar la idea que tengo en la cabeza. Pero hay ocasiones en las que me exijo demasiado, no sale como esperaba y termino frustrándome. Yo me tomo mucho tiempo haciendo un diseño y hay casos en que aunque no me guste tanto el diseño, mis clientes quedan felices. Eso es lo que importa”, concluyó.
Imagen: Yehor (vía iStock).