Por quinto año consecutivo, Visa presentó en Miami su reporte de fraude online 2016, que tiene como objetivo analizar las tendencias y prácticas actuales en administración y prevención del fraude en comercios pequeños y medianos en América Latina.
De acuerdo con este reporte, los comercios de América Latina muestran un índice de contracargos del 1.4% y un índice de rechazo de órdenes del 0.8%. Para los exponentes del informe, esto refleja que probablemente los comercios de América Latina están sacrificando una cantidad importante de órdenes válidas, generando un impacto negativo en sus clientes y en su balance final.
Un contracargo se genera cuando un tarjetahabiente se pone en contacto directo con su banco para informarle que no reconoce un cargo hecho a su tarjeta de crédito o débito. En ese momento, el banco emisor (banco del tarjetahabiente) crea una solicitud de contracargo hacia tu negocio.
De igual forma, con un índice de revisión manual del 29%, es posible que los comercios de América Latina no estén aprovechando herramientas automatizadas para reducir costos y optimizar la aceptación de órdenes.
Específicamente en Colombia, este reporte encontró que el 85% de los comercios del país realizan revisión manual de sus órdenes bajo el siguiente esquema: el 26% de las órdenes son revisadas manualmente, el 43% de las órdenes revisadas manualmente son finalmente aceptadas, el 10.1% de las órdenes de Colombia son rechazadas por sospecha de fraude y el 1.9% de las ventas se convierten en contracargos.
El reporte también evidenció que las herramientas de detección de fraude más utilizadas en América Latina son: Número de verificación de tarjeta (CVN), servicios de validación de domicilio postal ,Google Maps Lookup, verificación de número telefónico – búsqueda inversa, autenticación del pagador (3-D Secure), redes sociales y el historial crediticio.
Visa concluyó que existe un gran reto para los comercios de América Latina en materia de eficacia en estrategias de prevención de fraude, especialmente en canales móviles, más si se tiene en cuenta que según un estudio realizado por Euromonitor International, América Latina representa una pequeña pero creciente parte del total de ingresos por ventas en línea en el mundo: se estima que las cifras de ecommerce en la región ascenderán de los 4.800 millones de dólares reflejados en 2015 a 16.600 millones en 2020.
Imagen: Pixabay.