El guion de la historia de Netflix parece haber llegado a su punto de drama y conflicto, y muestra que no todo es perfecto en el paraíso. Netflix, la compañía que barrió en los últimos años con el mayor botín en el negocio de las películas y las series de TV en streaming, tuvo por primera vez un traspié en ocho años y sus acciones en el mercado bursátil sufrieron una dolorosa caída: 12 por ciento. El antagonista en esta historia ya quedó claro: los inversionistas podrían estar sintiendo temor ante la creciente competencia que está enfrentando Netflix, según la agencia Reuters.
Netflix anunció que, por primera vez desde el 2011, perdió suscriptores en Estados Unidos, y la cantidad no es baja: 130 mil abonados dejaron el servicio en el segundo trimestre del 2019. Y a esto se sumó que la empresa no pudo cumplir sus metas en los mercados internacionales en ese mismo período, ya que su base de suscriptores creció 2,8 millones, frente a los 5 millones que se anticipaban.
Aunque la empresa sigue teniendo una base de suscriptores gigantesca (152 millones en todo el mundo), que su valor en el mercado sufra una caída tan fuerte muestra simplemente que Netflix tendrá un camino mucho más pedregoso de aquí en adelante, ante la gran cantidad de competidores que buscan robarle una mayor porción del pastel del contenido en streaming, entre ellos titanes como HBO, Disney, Amazon y Apple.
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Para seguir manteniendo su liderazgo, Netflix necesita que su base de suscriptores siga creciendo, y que sus series sigan siendo muy apetecidas. Infortunadamente, en ambos frentes parece haberse debilitado.
En una carta para sus accionistas, Netflix admitió que no cumplió con sus proyecciones a nivel global, pero especialmente en las regiones que tuvieron un incremento en el precio del servicio. Durante los últimos años, el servicio de Netflix, que era atractivo entre otros por su precio muy bajo, ha tenido aumentos fuertes en el costo de la mensualidad.
Reed Hastings, presidente de Netflix, estaba equivocado cuando dijo que su mayor competencia era la necesidad de las personas de dormir.
De otro lado, la compañía admitió que su contenido original contribuyó menos de lo que se esperaba al crecimiento de las ventas del servicio. Pero se espera que esa situación la pueda revertir la llegada de nuevas temporadas de series muy exitosas, como ‘Stranger Things’ (que se estrenó a comienzos de julio), ‘La casa de Papel’, ‘The Crown’ y ‘Orange is the New Black’.
Por lo pronto, varios medios le están cobrando a Reed Hastings, presidente de Netflix, una frase de hace un tiempo: que su mayor competencia era la necesidad de las personas de dormir. Probablemente él quisiera poder borrar esas líneas de sus diálogos en esta historia.
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