Como se esperaba, Samsung confirmó este jueves que su desempeño en el segundo trimestre de 2016 fue el mejor en ventas en dos años para la compañía. La empresa surcoreana dijo que obtuvo utilidades de 8,14 billones de won (7.228 millones de dólares) sobre ingresos de 50,94 billones de won (45.234 millones de dólares). Más de la mitad de las utilidades, 4,32 millones de won (3.831 millones de dólares), vinieron de la división de IT y Comunicaciones.
La compañía aseguró que los buenos resultados se debieron al “crecimiento en las ventas de productos estrella, como el Galaxy S7 y S7 edge“. Los ingresos superaron en 4,8% a los obtenidos en el mismo período del año pasado. Además, Samsung informó que su división de semiconductores tuvo un buen comportamiento a pesar de las tendencias negativas en el mercado. Además, Samsung aseguró que la devaluación del won coreano le costó 300 millones de won en utilidades.
“El lanzamiento de un nuevo teléfono insignia de pantalla grande ayudará a mantener las sólidas ventas de smartphones de gama alta“, dice el comunicado. Se espera que el Galaxy Note 7 sea lanzado la próxima semana en un evento en Nueva York.
Como resultado, Samsung espera que aumente la demanda por pantallas curvas y OLED, por lo que también tiene expectativas de crecimiento en su división de paneles y de componentes para dispositivos móviles.
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