Samsung anunció en el CES una nueva generación de su Smart TV. El hecho de que le hubiera incorporado procesadores de cuatro núcleos hace que las expectativas se eleven, pues ya hemos visto en los móviles lo que esos chips pueden hacer. Así que nos pusimos a la tarea de intentar que nos dejaran ‘jugar’ con uno de ellos un momento, y aunque Samsung no permite que nadie diferente a sus empleados manipule los dispositivos expuestos en el CES, sí fueron muy gentiles y nos hicieron un demo completo y real. Aquí los resultados:
Hay que decir que el cambio de interfaz fue una muy buena decisión de parte de Samsung. La primera generación era difícil de manejar: tenía un montón de íconos y el usuario se podía sentir perdido a la hora de navegarla. Los cinco páneles con los que Samsung organizó su televisor le facilitan la vida a quien se sienta al frente: le permiten encontrar lo que está buscando de una forma muy intuitiva.
La navegación a través de ellos no está mal, pero podría se mejor. El televisor se mueve rápidamente entre los diferentes páneles, pero a veces aparece un pequeño ‘lag’ o retraso que hace que la cosa no sea del todo fluida. La mayoría de las aplicaciones y opciones abren rápido, pero hubo un par de veces en las que el TV dejó de responder. No sabemos si era por la conexión, porque se trataba de un prototipo con una que otra tuerca por afinar o porque el dispositivo tiene problemas, pero tenemos que darle el beneficio de la duda y esperar que cuando salga al mercado todo eso estará solucionado.
La calidad de imagen no está mal, pero no está entre lo mejor que hemos visto en el CES. Es la primera vez, sin embargo, en la que veo en el CES un demo con la señal de TV común y corriente, y no con una grabación especialmente hecha y servida para la exhibición. El resultado es un poco decepcionante: la imagen tiene mucho ruido, un poco de interferencia y no se ajusta a la calidad que se esperaría de un dispositivo de gama alta.
Aunque no pudimos tener el control en la mano, podemos decir que parece cómodo y está bien construido. Tiene un trackpad en la mitad que permite la interacción con el televisor, que funciona bien casi siempre pero, de nuevo, sufre eventualmente de pequeñas fallas.
Por fuera, el televisor es bellísimo. Tiene una construcción muy liviana y brillante, parece que estuviera flotando. La cámara se despliega automáticamente desde la parte superior cuando es necesaria, como cuando se hacen conferencias por Skype o una aplicación necesita tomar una foto. No le vimos botones delanteros.
Además, pudimos ver el kit de evolución de Samsung. Este dispositivo se les adapta a los televisores de ese fabricante comprados el año pasado, y automáticamente permite obtener la nueva interfaz y las funcionalidades presentadas recientemente. Sin embargo, si el hardware no es el mismo, posiblemente la experiencia no sea tan buena.
Este televisor es un buen ejemplo del estado actual de la tecnología ‘Smart TV’: aunque los dispositivos ya ofrecen funcionalidades interesantes y atractivas, todavía pueden ser mucho mejores. Samsung, y otros fabricantes, están dando pasos en ese camino.
Como se ha vuelto costumbre, aquí está la galería para que lo vean por ustedes mismos.
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Cuando se trata de trabajar con las funciones Smart, Sony le lleva años de ventaja. Porque en enter no dejan tanta pauta paga y también muestran un poco las bondades de la competencia?
Cuando se trata de trabajar con las funciones Smart, Sony le lleva años de ventaja. Porque en enter no dejan tanta pauta paga y también muestran un poco las bondades de la competencia?
Sé que no viene al caso, pero el que hizo la prueba del control pudo haberse cortado un ‘poquito’ las uñas :S jajaja
depronto peña las usa de noche, no se…
jajajaja, era una señora de Samsung.
Sé que no viene al caso, pero el que hizo la prueba del control pudo haberse cortado un ‘poquito’ las uñas :S jajaja
depronto peña las usa de noche, no se…
jajajaja, era una señora de Samsung.