No estamos tan lejos de ver el carro del futuro, a menos de que estemos pensando en una cápsula flotante con asientos que salen de la parte de abajo después de que su esposa le quitó la billetera. Pero la industria automovilística está avanzando rápidamente, y tras una ardua historia de intentos de carros autónomos, está a tan solo unas décadas más de ser posible. Así que en esta ocasión les hablaremos de las tecnologías actuales que nos están llevando al carro del futuro, hoy.
La seguridad inmediata
El primer paso a los vehículos del futuro es asegurar a los pasajeros que los utilicen. Para ello la ciencia y la ingeniería se comunican mutuamente para controlar la causa de los errores que generan la mayoría de accidentes: los humanos. Es nuestra naturaleza errar, y en la carretera hay miles de factores que hacen que nuestro carro se descontrole. Por suerte los avances dieron los primeros pasos con dos sistemas de prevención: La asistencia de frenos de emergencia y el control de estabilización electrónica.
El futuro nos provee con mejores tecnologías que evitan los accidentes causados por los errores humanos
La asistencia de frenos de emergencia ha ayudado a los conductores, y a los mismos vehículos, a reaccionar de forma segura e inmediata a un obstáculo que no se pueda prever, o que el conductor solo advierta a última hora. Gracias a este sistema, los conductores y los nuevos carros autónomos que nacen pueden reaccionar y frenar en distancias entre 6 y 9 metros. Aunque los conductores deberíamos prever mínimo 30 metros de distancia, este sistema es útil para evitar un accidente causado –por ejemplo– por la pelota que patearon mal hacia la calle.
Por otro lado, a altas velocidades sobre una carretera que no es pareja o en situaciones de cansancio es usual que el auto tienda a descontrolarse e ir moviéndose hacia alguno de los laterales. Para solucionar esto, el control de estabilización electrónica identifica la dirección y el control del usuario, identificando ese desliz sutil que puede causar un accidente indeseado. Este sistema de estabilización le da un mejor control al usuario y el automóvil, y puede evitar que nos vayamos por la borda.
Electrones en movimiento
El futuro de los automóviles no sólo se encuentra en la seguridad, también dependen de un cambio ambiental que aproveche mejor los recursos. La solución en este aspecto fue la llegada de los carros eléctricos, a la cual muchos fabricantes han demostrado gran compromiso como Renault y su tecnología Eco2 driving.
La seguridad primero, pero también un consumo de energía más eficiente
A pesar de que los carros eléctricos tienen menos potencia para andar en superficies que demandan más motor, son una solución para las ciudades. Los ecovehículos le permiten al consumidor ahorrar en gastos de gasolina y son muy eficientes para moverse a diario. Si a esto se le suma los avances en el desarrollo de páneles solares más completos, e incluso transparentes, veremos en el carro del futuro microceldas solares que ayudarán a cargar el carro de día, dejando la necesidad de utilizar el enchufe solo cuando haya que recargarlo por la noche.
Ya son niños grandes
En nuestro especial de carros inteligentes vimos todas las ventajas que podrían traer consigo: no más tráfico, mucha más seguridad y comodidad en cada viaje. Estos son los avances que existen actualmente de los carros autónomos que marcarán el futuro de los carros que veremos llegar probablemente entre el 2030 y 2050.
Los avances actuales permiten llegar a niveles de autonomía tipo 3 (donde el carro se maneja solo pero el usuario puede intervenir en el control en caso de una medida de seguridad) y tipo 4 (donde el vehículo tiene total autonomía, y el pasajero se dedica a ver videos de gatos en YouTube). Hasta ahora son los primeros avances de este tipo de tecnología, pero el futuro ya se ve prometedor para los conductores.
En el futuro solo será sentarse y disfrutar del viaje viendo videos de gatos
Los carros del futuro estarán constantemente conectados a nuestros dispositivos para estar al tanto de cuando los necesitamos. El transporte público será mucho más eficiente, las empresas tendrán mejores servicios de taxi que lleguen por nosotros y nos dejen en la puerta del hogar. Y una vez más, sin más accidentes por conductores desprevenidos, ebrios o dormidos.
Estos carros están llenos de tecnologías sensoriales que permiten que actúen rápidamente, y que puedan prever obstáculos a cientos de metros de distancia. A cambio, habrá que hacer un sacrificio de privacidad por las mismas exigencias de los sistemas, pero son pequeños sacrificios a una calidad de vida mejor.
Después de eso, sí pensaremos en un disco volador como el de los Supersónicos.
