Por Michell Escutia, director regional de Soti, y Fabián Rodríguez, presidente de Intechsys.
La movilidad corporativa es hoy más grande, amplia y complicada que nunca. Para el año 2020, el 42 por ciento de la fuerza laboral global será móvil.
Las empresas dependen de dispositivos, aplicaciones y contenido para que sus trabajadores puedan realizar su trabajo desde cualquier lugar y en cualquier momento. Asegurar y administrar toda esa tecnología móvil se ha convertido en un trabajo críticamente importante. Por eso, las empresas están incorporando soluciones de administración de movilidad (EMM) para tratar el grado de complejidad que trae una implementación móvil.
A continuación, presentamos cinco aspectos que deben tener en cuenta las organizaciones al realizar una nueva implementación de movilidad.
1. No planear es igual que planear para fallar
Las empresas pueden optar por comprar equipos más baratos, pero no consideran sus capacidades de seguridad y administración. Es posible, por ejemplo, que los dispositivos económicos no sean compatibles con las capacidades de administración de Android Enterprise (AE) de Google, que no cuenten con capacidades de administración integradas o que la solución de EMM no sea compatible con ellos.
Al respecto, Soti e Intechsys recomiendan investigar y considerar el Costo Total de la Propiedad (TCO ), no solo el costo de adquisición. Así, puede consultar antes de decidir qué dispositivos va a adquirir.
2. Las divisiones son absurdas.
Cualquier desconexión entre los departamentos de adquisición y de TI puede poner en peligro una implementación de movilidad. Las partes interesadas con diferentes agendas pueden trabajar juntas para establecer quién debe utilizar qué tipo de dispositivo móvil (portátil, tableta o teléfono inteligente) y qué aplicaciones necesitan.
Antes de la compra, dicen Soti e Intechsys, se debe establecer un presupuesto para dispositivos móviles y realizar una Prueba de Concepto (POC ) completa en manos de usuarios reales. Esto evitará la ‘sorpresa de precio’ que identificará cualquier limitación en hardware, software, seguridad o administración.
3. Elija el momento oportuno.
Una mala decisión al respecto puede frenar su estrategia móvil. Si comienza demasiado pronto, los dispositivos pueden volverse obsoletos. Comenzar demasiado tarde estresa al equipo de implementación, lo que resulta en errores u omite pruebas importantes. Una larga demora entre la adquisición y la implementación puede requerir una actualización crítica del sistema operativo posterior.
Por eso, mencionan Soti e Intechsys, se debe incorporar tiempo para, entre otros, probar y solucionar problemas, certificar dispositivos con la solución EMM y otra infraestructura de TI , así como implementar por etapas para mitigar riesgos de fallas.
4. La importancia de un sistema operativo correcto.
El sistema operativo es tan importante como el hardware para conocer las capacidades de seguridad y administración. Esto es fundamental para las empresas que cambian de sistemas operativos heredados como Windows CE, a uno más nuevo como Android, iOS, Windows 10 o Linux. Soti e Intechsys recomiendan analizar las capacidades de gestión en diferentes sistemas operativos.
5. Una sola prueba.
Si pone dispositivos y aplicaciones incorrectas en manos de usuarios incorrectos, no se sorprenda si batallan para usarlos de manera efectiva. Por eso, debe entender bien sus habilidades técnicas. Bloquee los dispositivos a su funcionalidad principal y ofrezca soporte para capacitar y solucionar problemas que puedan surgir. Además, es aconsejable crear un grupo de Pruebas de Aceptación del Usuario en varios departamentos que puedan realizar pruebas piloto y proporcionar comentarios sobre la implementación.
