Con ‘Constitución web’, Islandia cree en la democracia electrónica

Foto: Ezioman (via Flickr)
Islandia presentó su proyecto de ley para cambiar la Constitución de su país, y este fue construído a partir de la participación activa de los ciudadanos por la Red. Un ejemplo para Colombia y América Latina.

¿Una Constitución hecha por los ciudadanos? Internet lo hace posible. Foto: Ezioman (via Flickr).

La tecnología e Internet han generado cambios en todas las áreas, pues se aplica en todo en lo que desarrolla el ser humano, y esto no excluye la forma como se establecen las leyes y normas que rigen las relaciones humanas y hasta un país. El mejor ejemplo es lo que ha sucedido en Islandia, donde se ha presentado un proyecto de ley para una nueva Constitución que ha sido construido por un grupo de personas a partir de una participación activa por Internet.

Islandia es un pequeño país con menos de 350.000 habitantes que ya había utilizado Internet para generar estrategias de turismo. El pasado 27 de julio se aprobó este proyecto de ley para someter a votación pública la nueva Constitución, pues la actual está basada en la constitución de Dinamarca y fue adaptada en 1944, teniendo pocos cambios hasta la actualidad. El pueblo, a partir de la crisis económica de 2008, demandó una nueva Constitución acorde con los nuevos retos para el país, y la construcción de este proyecto se hizo a partir de la Red.

El prólogo del proyecto de ley que fue aprobado comienza de la siguiente manera: “Nosotros, los que habitamos en Islandia, deseamos crear una sociedad justa, donde todos sean iguales. Nuestros diferentes orígenes nos enriquecen como un todo, y juntos tenemos la responsabilidad de la herencia de las generaciones, la tierra y la historia, la naturaleza, el lenguaje y la cultura”.

La forma en que esta iniciativa encontró la preservación de esa herencia fue adoptando la tecnología e Internet como la forma de acercamiento de la ley al pueblo, del que todos hacen parte del equipo de trabajo. Para ello se habilitó un sitio web en el que siempre se encuentran avances del texto y se pueden hacer comentarios al respecto, y también la opción de enviar mensajes directos de manera personal –no se permiten mensajes anónimos– al Consejo Constitucional para crear diferentes debates.

Se utilizaron servicios web como Facebook, Twitter y YouTube, en los que se realizaron entrevistas con los delegados del Consejo y diariamente a la 1:30 p.m., hora local, se realizaba la transmisión en directo de las reuniones del Consejo Constitucional. La importancia de que el público estuviera enterado de los avances se reflejaba en el boletín semanal publicado en su sitio web, para que no existiera oportunidad de perder de vista el proyecto.

Esta estrategia resultó ser una excelente solución a lo que la mayoría de ciudadanos percibe como un desordenado proceso de legislación en la mayoría de países, y es la demostración de que los medios tecnológicos pueden y deben tener un papel dentro de la creación de cualquier tipo de proyectos.

¿Sería aplicable un proceso similar en alguno de los países de América Latina? ¿Estamos preparados para este tipo de iniciativas?

Tal vez hacer una Constitución en países más grandes y con realidades más complejas que la islandesa sea algo aún muy difícil, pero en la región los legisladores podrían dar algunos pasos permitiendo que ciertas leyes contaran con el aporte directo de los ciudadanos vía Internet. En Colombia, por ejemplo, el proyecto de Ley conocido como ‘Ley Lleras’ sería una oportunidad perfecta para que los ciudadanos y otros interesados que han participado activamente en los debates puedan colaborar con la redacción final, y sus palabras no se queden en el aire.

Notas relacionadas:

Diana Luque Lavado

Diana Luque Lavado

Escribir me ha llevado por muchos lugares en la vida y ahora estoy escribiendo sobre tecnología, que no es un tema nuevo para mí. Mi vida digital comenzó con mi primer blog en 2006, he pasado por muchas redes y he tenido muchos nicknames.

La conclusión siempre es la misma: la tecnología está para hacernos la vida más fácil.
Acá espero poder hablar también de la motivación de mi vida, el audiovisual. Todos los avances tecnológicos han afectado no únicamente la forma de hacer cine, televisión o videos; también la forma de contar historias. Lo normal en un perfil es decir que estudié Cine en la Universidad Nacional de Colombia, soy guionista y que ahora estudio Literatura en la Universidad Javeriana. Pero prefiero que sepan que soy docente de corazón y que vivo mi vida con pasión. Eso se refleja desde mis escritos, pasa por las clases, y llega hasta Depeche Mode, The Big Bang Theory, Dexter y el té.

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4 comments

  • La política en todos sus campos tendrá que adquirir el ritmo que llevan la ciencia y la tecnología porque esta creciente descompensación va a causar grandes crisis, una de ellas, el desempleo, ya comenzó como puede observarse en la página http://www.newglobalorder.net.

  • Suena genial la idea de hacer esto, pero debemos ser realistas. La clave para que Islandia lograra hacer esto es la alta conectividad y, sobre todo, la pequeña población comparativa que dicho país tiene. Hagamos un ejemplo similar para Colombia, somos 46 millones, digamos que 1/5 solamente pueden participar en la configuración (ya sea por edad o por acceso). De esos, es claro que no todos van a tener interés en participar, digamos un 30%, y, además, es claro que unos solo van a tener interés en participar si pueden sacar provecho directo de ellos, o mejor dicho venta de votos, puede ser un 10%, del resto se puede suponer que van a participar con toda la intención.

    De esa reducción notable, aunque arbitraria para fines del ejemplo, nos quedan que +- 5 millones de personas van a participar con ideal en estas elecciones. ¿Uds se imaginan una discusión de 5 millones de personas, teniendo en cuenta las características culturales iberoamericanas, para decidir una Constitución?…es IMPOSIBLE, además de que económicamente se ha demostrado la imposibilidad, o dificultad, de tener una decisión colectiva.

    Suena muy bonito en Islandia, pero es imposible para nuestras sociedades, al menos en el corto y mediano plazo, llegar a este estado de las cosas.

    • Apreciado copdeb usted tiene razón, quizá son menos colombianos los habilitados por conectividad y aún menos los capacitados por nivel intelectual para llevar a cabo una gestión tan democrática como la que se pretende en Islandia pero nuestro sistema electoral es similar, los votos con conocimiento de causa no sobrepasas del 10 por ciento y todos los demás si no son comprados son votos afectivos inducidos por la prensa. En cuanto a la conectividad física sobre nuestro territorio, por favor, vea la principal causa en la página http://www.hugosalamancaparra.net

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