La votación del polémica articulado culminó con 96 votos a favor y 56 en contra. La norma ya se conoce como ‘ley Nokia’.
Expertos en judicatura han advertido que esa nueva legislación va en contravía de los derechos fundamentales de las personas. Hasta ayer, para intervenir las comunicaciones de un empleado (correo electrónico, mensajes de texto o mensajería instantánea) era necesario en ese país obtener un permiso judicial.
La norma contempla que los empresarios podrán controlar la hora y fecha de envío de los mensajes, el tamaño y el tipo de archivo que se adjuntan en las comunicaciones, así como el remitente y el destinatario de los correos. Los empresarios no podrán acceder al contenido de los mensajes.
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