Montserrat Domínguez tiene la responsabilidad de crear un medio en español que le haga justicia a The Huffington Post. Y lo hace sin perder la diplomacia. Con un equipo de ocho periodistas que “hacen de todo“, la directora de El Huffington Post, la versión hispana del HuffPo, sigue las huellas de un monstruo con una nómina de más de 400 personas, que inventó una forma de hacer periodismo en Internet –que tiene sus ‘fans’ y sus detractores– y que cada vez más se consolida como un medio relevante.
Aunque Internet es un mundo en el que recién incursiona, ya está trabajando en la tarea. Este miércoles, mientras era la invitada especial del evento inaugural de la Maestría en Periodismo de la Universidad del Rosario, se anunciaba que Juan Manuel Santos y Juanes entraban en la nómina de sus blogueros. En Estados Unidos, esa lista es una versión 2.0 del clásico índice ‘Quién es quién‘, y la idea es que eso también ocurra en la versión española.
ENTER.CO habló con Domínguez sobre el presente, el futuro y los retos del periodismo en Internet.
Usted trabajaba en radio y TV. ¿Cómo le ha ido ‘saltando’ a Internet, donde todo es tan diferente?
Pues en eso estoy, aprendiendo. Un medio nuevo, una manera distinta de presentar la información que la TV y la radio. Pero la materia prima es la misma, es la información. Se trata de elaborarla y presentarla de manera distinta.
¿En qué es diferente la versión en español de The Huffington Post de la versión en inglés?
Claro. 400 personas pueden hacer cualquier cantidad de cosas. Son muchos más, tienen muchas más secciones. Nosotros, de momento, tenemos pocas. Cuando seamos más, podremos alimentar, crear distintas páginas, tener periodistas especializados.
¿La elección y el enfoque de los temas es diferente?
Es diferente: The Huffington Post se dirige fundamentalmente al público de los Estados Unidos, y El Huffington Post se dirige al público en español. Es un medio que nace en España, y que está enfocado buscando la personalidad y el agarre entre el público español.
¿Cómo quieren entonces atraer al público latinoamericano?
Yo creo que cualquier medio en español genera interés en Latinoamérica, de la misma manera que nosotros [los españoles] consultamos medios latinoamericanos. Lo que ocurre es que la situación política por la que nosotros atravesamos en España es muy intensa en estos momentos y es nuestra obligación como periodistas atenderla.
Además, tenemos un contenido de interés más general, que apela a personas de todo el mundo, con temas internacionales, de ecología, tendencias, de cultura, que tienen su interés en cualquier parte del mundo, especialmente si lo puedes leer en español.
Cómo ve el negocio de los medios digitales. ¿Ve que a mediano plazo sea posible conseguir más ‘músculo’ para hacer contenidos más elaborados?
En eso es en lo que estamos, en tratar de explorar las posibilidades que tiene la Internet como modelo de negocio. La edición norteamericana del Huffington Post es un ejemplo de que puede ser rentable; y nosotros, en la medida más pequeña, estamos explorando la manera en la que una página web puede atraer la suficiente publicidad para mantenerse y, además, crecer.
En términos de contenidos, ¿qué le ofrece Internet al menú de información?
Los contenidos son los mismos. Lo que cambia es la manera que tenemos de presentarlos y de abordarlos. La gran diferencia que hay el Huffington Post no es tanto de contenidos, porque las noticias son las que son, sino de la manera de presentarlos y la manera de vincular a los lectores que participen a través de sus comentarios y de sus opiniones.
En ese sentido, ¿qué tan importantes son las redes sociales para ustedes?
Absolutamente importantes. El contenido se mueve mucho a través de las redes sociales. Confiamos en que sea la gente, a través de las redes sociales, la que movilice y que cuente. De hecho, en este momento casi el 20% del tráfico de The Huffington Post entra a través de Facebook o de Twitter, que son las redes más importantes para nosotros.
¿Usan las redes para producir contenido?
Muchísimo. Todos los ‘trending topics’, todas las noticias que tú ves calientes en las redes sociales y que a veces no llegan al radar de los medios tradicionales, las convertimos en una noticia dentro del Huffington Post.
Usted habla mucho de la ‘cultura del enlace’. ¿Cómo es eso?
La cultura del enlace se aplica en cualquier medio online. En lugar de leer las notas a pie de página que aparece en la bibliografía, en los libros de texto, la tienes directamente en los links que tú lees. Es la cultura de la Red, la cultura de Internet.
Nosotros practicamos una cosa con absoluta transparencia: enlazar a noticias que producen otros medios de comunicación que nos parecen importantes. ¿De qué manera lo hacemos? Hay dos vías: O contar lo que ha contado The New York Times, citar al New York Times; o directamente enviar tu tráfico y tus lectores a que lean de primera mano qué es lo que está publicando el New York Times. Los medios tradicionales se resisten habitualmente a utilizar enlaces a otros medios, especialmente si son de la competencia.
¿Cómo ve el futuro de los medios digitales? ¿Hacia dónde cree que se van a ir?
Es un campo absolutamente abierto en estos momentos. Yo no veo tendencias clarísimas. Estamos viendo cómo conviven los grandes grupos con iniciativas pequeñas que están poniendo en marcha pequeños emprendedores y periodistas, que se convierten en empresarios en la Red y van a nichos más pequeños del mercado, especializados en cultura, música o periodismo de investigación, y buscan una fórmula diferente para subsistir. A mí me parece la gran oportunidad, el gran hallazgo que tenemos en estos momentos.