La cuarta entrega de la saga ‘Souls’ fue el regalo perfecto para sus fans. No solo entregó esos elementos del juego que lo convierten en un desafío (y por lo mismo un placer para aquellos que quieren completarlo), sino que nos llevó de regreso a ese mundo sumido en un caos apocalíptico.
‘Dark Souls 3’ es un juego que requiere de paciencia para superarlo. Esto se puede ver no solo en el diseño de los niveles (laberintos plagados de enemigos que no se pueden subestimar), sino también en la forma en la que el juego te pide que enfrentes cada nuevo enemigo, que recorras cada nueva área en busca de secretos que descubrir.
La cuarta entrega tiene también el mejor sistema de pelea de toda la saga. La variedad de armas y las diferentes formas de mejorarlas y aplicarlas a tu estrategia convierten este juego en un rompecabezas que el jugador debe resolver si quiere alzarse con la victoria.
Algunos de los jefes de ‘Dark Souls 3’ tienen unos de los niveles de dificultad más altos (incluso para jugadores veteranos) y se puede apreciar la influencia que ‘Bloodborne’ tuvo en el desarrollo de los mismos. Transformaciones y patrones de ataque que cambian son algunas de las cosas que convirtieron cada jefe en una montaña por escalar, con diferentes grados de satisfacción, por supuesto.
‘Dark Souls 3’ merece su nominación por tener la capacidad de sumergirte en un viaje épico. Es un recorrido en el que la derrota y la frustración siempre están presentes. Y, sin embargo, tienes la necesidad de volver e intentar una vez más derrotar a esos enemigos en un duelo de David versus Goliat.
Imagen: ‘Dark Souls 3’ web site
Definitivamente es el juego indicado para este tipo de premio.