Para muchas personas, el gran obstáculo que les impide comprar una televisión con 3D es la necesidad de usar gafas para disfrutar la tecnología. Uno de los grandes mitos de la TV 3D es que las personas, al ver aparatos que omiten los anteojos como el Nintendo 3DS, piensan que pronto una nueva tecnología similar estará disponible en televisores. Samsung, sin embargo, no está de acuerdo.
Según declaraciones de B.K. Yoon (inglés), presidente de Despliegues Visuales de Samsung Electronics, el futuro libre de gafas que la gente está esperando llegará, pero se demorará para el caso de televisores.
“Creo que será posible en celulares y otros dispositivos móviles, o en monitores o pantallas más pequeñas (…), pero proveer TV en 3D sin gafas no va ser posible en los próximos 5 a 10 años”. De acuerdo con Yoon, el mayor problema con la masificación de esta tecnología es el precio.
A pesar de los reparos de Samsung, algunas empresas competidoras no parecen ver ese futuro tan lejano. Toshiba anunció que en diciembre lanzará su primera línea de televisores 3D y Sony tiene planes similares.
Sin embargo, en ambos casos se cumple lo dicho por Yoon, pues ninguna pantalla supera las 20 pulgadas, un tamaño muy inferior a lo que los consumidores de hoy están acostumbrados por 2.900 dólares (o 5,2 millones de pesos).